Cuáles son los tres billetes de 1 dólar que pueden valer varios millones

Los billetes de 1 dólar son comunes en los Estados Unidos, pero hay algunos que pueden valer varios millones de debido a su rareza o el su estado de conservación. 

Si estás interesado en coleccionar billetes de un dólar, es posible que desees saber cuáles son los billetes que pueden valer una fortuna.

¿Cuáles son los billetes de 1 dólar más valiosos del mundo?

Una de estas piezas considerada valiosa es el billete de 1 dólar de 1890, conocido como el billete de "Grand Watermelon" (Gran Sandía). Su apodo se debe a la forma en que los ceros en su diseño se asemejan a las semillas de una sandía. 

El billete de Grand Watermelon es muy raro y se subastó por más de USD 3 millones en 2018.

Otro billete muy valioso es el billete de 1 dólar de 1869, conocido como el "Rainbow Note" (Nota del Arco Iris). Este billete es extremadamente raro debido a su diseño único, que presenta una amplia gama de colores brillantes. 

El Rainbow Note se subastó por más de USD 2 millones en 2019.

Los errores de impresión los hacen valer más

Los billetes de 1 dólar que tienen errores de impresión también pueden ser muy valiosos. Por ejemplo, un billete de 1 dólar con el número de serie invertido se subastó por más de $100,000 en 2017. 

Otros errores de impresión que pueden aumentar el valor de un billete de 1 dólar incluyen billetes con impresiones dobles, billetes con impresiones en la posición incorrecta o billetes con cortes irregulares.

Es por esto que si estás buscando coleccionar billetes de un dólar que puedan valer cientos de dólares, debes buscar ejemplares raros, con diseños únicos o con errores de impresión. 

Estos billetes pueden ser difíciles de encontrar, pero si lo logras, pueden ser una inversión valiosa para tu colección.

Y esto también sucede con los euros. Por ejemplo, existen monedas de euro en circulación con errores que valen una fortuna: la moneda de 2 euros de Lituania -acuñada en 2021-, de la cual hay apenas 500 copias en circulación y que presentan un fallo de impresión, lo que permite venderlas en el mercado coleccionista hasta por 2000 euros.