El diputado fueguino del bloque Republicanos Unidos, Santiago Pauli, condenó enérgicamente el escrache que realizó ayer en el aeropuerto de Río Grande, la dirigencia y afiliados de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) hacia el senador Pablo Blanco, calificándolo como un hecho "lamentable, inaceptable".

Ante lo sucedido, el diputado nacional, Santiago Pauli, se expresó a través de su cuenta en la red social X diciendo lo siguiente "los dirigentes sindicales de la UOM son una manga de corruptos y mafiosos que se hacen los malos porque vienen de a varios, típico de miedosos que usan a los trabajadores como escudo, pero cuando te cruzan solos no dicen ni mu”.

Más allá en su crítica, Pauli sostuvo que la conducción de la UOM "no representan a los trabajadores, a quienes viven apretando y extorsionando, y ni siquiera al total de los delegados en fábricas, que solo responden porque están obligados a hacerlo".

En este sentido, el diputado libertario les recordó a los dirigentes de la Unión Obrera Metalúrgica que a raíz de sus maniobras "acordaron congelar el sueldo a los trabajadores hace un tiempo atrás. Todos tenemos buena memoria", aseveró.

Ante lo ocurrido ayer, instó a la dirigencia del sector a "que sigan pegando los carteles que quieran, pero la época de la violencia se terminó".

Por último, Santiago Pauli fue determinante al advertir que "así como el pueblo votó una opción política nueva, si siguen mintiendo, amenazando de muerte, apretando a trabajadores que no les responden y no dando cuenta del dinero que les sacan a ellos, pronto los mismos que los votaron se van a despertar y cambiar también a la dirigencia sindical", cerró el diputado.