El equipo de El Siete llegó a la Antártida en un viaje cargado de sentimientos patrióticos

La periodista Marcela Navarro y el camarógrafo de El Siete Diego Sosa aterrizaron este mediodía de sábado en la Base Marambio de la Antártida

País23/12/202419640 Noticias19640 Noticias
El Siete- Antártida

El equipo de El Siete pisó la Antártida con la misión de transmitir en vivo y compartir a su audiencia cómo es la vida allí a través de "Antártida, crónicas del continente blanco". Sea por YouTube o por televisión, la cobertura resulta histórica para la pantalla mendocina y en este primer envío en directo terminó con lágrimas de emoción.
Cerca del mediodía de este sábado, con una sensación térmica de 10 grados bajo cero, la periodista Marcela Navarro y el camarógrafo Diego Sosa aterrizaron en Base Marambio en un vuelo en Hércules desde Río Gallegos (Santa Cruz).

Base Marambio se encuentra en una meseta de la Antártida, y apenas bajaron los pasajeros de El Siete fueron recibidos por una suave nevada en el territorio. Un paisaje imponente les encandiló la primera vista al bajar del avión Hércules junto a un grupo de 60 científicos y trabajadores con los que compartieron vuelo.
 
Una de las primeras imágenes de la Antártida que mostró El Siete este sábado, en vivo por la televisión y por YouTube y sus redes.

Se trató de un viaje cargado de ansiedad y a la vez paciencia, que resultó casi como estaba planificado. Es que los tiempos para hacer pie en la Antártida son inciertos porque todo depende de las condiciones climáticas que suelen ser adversas. Y esa espera para que se de una ventana y poder volar, suele extenderse hasta por un mes.

El equipo de El Siete partió el jueves desde El Palomar a Río Gallegos y a la medianoche de este sábado realizaron el último tramo al continente blanco que duró casi 4 horas. Ayudó elegir esta época de verano para viajar y concretar la travesía que llevó casi un año de producción. Además, en verano casi todo el día permanece el sol mientras que en invierno la mayor parte del tiempo es de noche.

El mendocino en la Antártida que está a cargo de la Base Marambio

El Siete llegó de este modo "al lugar más lejano que tiene el planeta", declaró emocionada la movilera Marcela Navarro apenas dio unos pasos en el lugar.

"Es maravilloso, estamos a 300 metros sobre el nivel del mar, no puedo evitar la emoción que siento al ver flamear la bandera argentina en este lugar que es argentino y por eso esta gente viene a hacer patria", expresó durante la transmisión en vivo en el especial que realizó este sábado El Siete, por TV y por YouTube, con salidas en directo tanto desde la Antártida como desde el Aconcagua donde otro equipo del canal cumple la misión de hacer cumbre.

La primera nota de cobertura fue con el mendocino Darío Castaño, quien es jefe de la Base Antártica Marambio, y se encuentra en la Antártida por tercera vez en su vida. "Es una pasión, un orgullo, y agradezco a mi familia que me apoya y acompaña desde Mendoza para hacer soberanía acá", afirmó Castaño a la pantalla de El Siete.

Y agregó que lleva un mes allí y "la idea es quedarme un año", dijo. En cuanto a la información sobre la forma de vida en el lugar, contó que "con los aviones Hércules se hacen todos los vuelos del personal que viene a la Antártida, no hay otra forma de llegar; estamos a unos 90 kilómetros de la Base Esperanza adonde viven 7 familias, son unas 50 personas de las cuales unas 17 son menores de edad".

El Siete reflejó la Antártida, un lugar para compartir trabajo y familia

Esas familias son las que se encontró Marcela y Diego al bajar del Hércules para darles lugar a lo que sería su partida de la Antártida, después de vivir allí durante casi un año.

Una de ellas, entrevistada por la periodista de El Siete en vivo, y que estaba a punto de retornar a su casa en Buenos Aires, contó que habitó la Antártida "desde marzo hasta ahora que estamos regresando, una vez que nuestros hijos terminaron el ciclo lectivo".

La gran cantidad de nieve y las bajísimas temperaturas hacen que la gente se abrigue mucho, con ropa térmica y calzado adecuados, así como antiparras para protegerse de los rayos solares. Esta condición de vida en el continente del fin del mundo quedó reflejada en el testimonio de Franco, uno de los niños que vivió la experiencia.

"Pasás todo el tiempo con campera, guantes y antiparras", explicó el pequeño, quien de lo que más le gusto dijo que fue "conocer de cerca a los pingüinos". Mientras, su hermana Delfina aportó que lo más complicado de vivir en la Antártida es "cuando me enterraba en la nieve y no podía caminar".

La mamá de los chicos, Soledad, confesó que "pasó muy rápido el año acá, la vida no fue muy distinta a la de allá, el tema es que cuando hay temporales de viento que no podés salir de la casa por días". Para esta familia, como muchas otras, la vivencia de la Antártida fue un sueño cumplido.

"Y un gran aprendizaje de darnos cuenta que no necesitamos tanto para vivir", destacó la mujer del militar Nallin Facio, quien mostró su felicidad de poder haber compartido su trabajo al lado de su familia. "Fue genial compartir este año mi trabajo como militar con mi familia", declaró a las cámaras de El Siete.

Los 300 viajes en helicóptero para llevar víveres a la Antártida

El equipo de El Siete también mostró la llegada de un helicóptero que, según revelaron, hace unos 300 viajes en estos días para traer alimentos, combustible y demás provisiones para abastecer todo el año 2025 a las familias que allí habitan.

"Desde el rompehielo donde llega el buque hasta acá Marambio para descargar son unas 5 millas, lo más cercano que pueden estar a la Antártida", especificó el mendocino Darío Castaño, a cargo de la Base Marambio, y completó que todo se aloja en "una especie de gran mayorista, un almacén gigante donde está todo lo que necesitamos para vivir en el año".

Y distinguió que "en Base Esperanza hay 7 casitas y las familias tienen su intimidad, pero en Marambio hay un solo comedor donde se reúnen para compartir los alimentos", describió el mendocino Darío Castaño, a cargo de la Base Marambio en la Antártida, acerca de cómo habitan quienes lleguen al lugar.

La Antártida, limpia de cualquier tipo de basuras

Marcela Navarro contó que el tratado antártico implica, entre otras cuestiones, que en la Antártida no puede quedar ningún tipo de desecho, de basura, para el cuidado estricto del ambiente.

"Acá no se puede construir, la pista es tierra porque no puede haber cemento, Chile colocó en su pista unos bloques que se pueden sacar y no dañan el medio ambiente", informó. Y agregó que las Fuerzas Armadas Argentinas, sólo colaboran con la logística de la vida en la Antártida, "pero no puede haber base militar, sólo hay bases científicas".

"La basura se recolecta y se carga en grandes bolsas en los Hércules para ser devuelta al destino de origen de los pasajeros", detalló la periodista de El Siete.

El Siete mostró la tarea científica en la Antártida

En Base Marambio hay diferentes instalaciones, una casa principal donde viven los habitantes, una capilla y el Laboratorio Antártico Marambio, entre otros espacios distribuidos sobre el hielo y teniendo al mar de Weddell en parte congelado como marco de fondo. El mendocino Darío Castaño contó que en invierno "uno puede caminar varios kilómetros sobre ese mar congelado".

El equipo de El Siete también entrevistó a un grupo de científicos para saber qué los lleva a trabajar en la Antártida. "Soy técnico de laboratorio científico que tiene el Instituto Antártico Argentino acá en Marambio", se presentó Juan Ignacio Kersevan, y explicó: "Hacemos mediciones de sismos, de rayos cósmicos también, entre un montón de investigaciones más".

El profesional aseguró que "Argentina es uno de los países que más tiempo lleva instalada en la Antártida y hace estudios científicos de forma ininterrumpida, todo el tiempo".

Por su parte, Gonzalo Gambarte, del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), relató que "estamos acá en Base Marambio con proyectos de índole nacional e internacional, estamos más que nada para las mediciones del efecto invernadero, gases reactivos, radiación ultravioleta y lo más reciente que es el agujero de ozono".

Resumió que su misión y la de sus compañeros es la vigilancia atmosférica que se viene monitoreando en la Antártida desde los años 80.

El Siete, en la cima de América y en el fin del mundo

En una cobertura en vivo inédita para la televisión mendocina, El Siete logró de este modo unir sus crónicas del Aconcagua y de la Antártida en vivo para la audiencia.

Desde la Base Marambio, Marcela Navarro saludó en directo a Felicitas Oyhenart que está instalada en Plaza de Mulas, cubriendo el ascenso que el equipo cumbre está haciendo en Aconcagua.

Las chicas de El Siete destacaron el valor de la solidaridad y el trabajo en equipo que se vive a flor de piel en este tipo de experiencias. Mientras en los estudios del canal, Marisol Benegas y Amadeo Inzirillo transmitían la cantidad de mensajes que recibían en el vivo de YouTube, además del Whatsapp del canal, felicitándolos por estas coberturas.

 Las coberturas en vivo de El Siete desde la Antártida y desde el Aconcagua, este sábado se unieron en un especial lleno de emociones.

"¡Unimos el Aconcagua con la Antártida!", expresó Felicitas para hacer un "choque de manos" a través de la pantalla, en un abrazo simbólico que terminó con ella emocionada hasta las lágrimas.

Este sábado el especial de El Siete fue de 3 horas seguidas, además de flashes con especiales todo el día, como lo viene haciendo desde el inicio de ambas expediciones. Abarcó todo el material de estas transmisiones históricas para la TV. Y este domingo a las 10 continúan las coberturas en vivo.

Te puede interesar

Martínez Sosa Banner

VondeerThuse diesta 1

Banner Cooperativa Electrica

Jonatan Bogado

Suscríbete al newsletter para recibir periódicamente las novedades en tu email

Florencia Vargas