Tras el fallo por tentativa de homicidio, la madre de Mía Villanueva apunta contra la Justicia

Luego de conocerse la sentencia que impuso 12 años de prisión a Mía Villanueva y Dylan Blanco por el intento de homicidio de Lautaro Ortigoza, la madre de la joven condenada hizo públicas sus críticas al proceso judicial y apuntó contra la actuación de los magistrados, la fiscalía y las fuerzas de seguridad.

Durante sus declaraciones, la mujer manifestó sentirse profundamente decepcionada por el veredicto. Comparó la pena impuesta a su hija con otras causas judiciales: “A los asesinos les dan 12 años. ¿Cómo puede ser que a mi hija le den lo mismo?”, cuestionó.

Asimismo, arremetió contra la víctima, Lautaro Ortigoza, acusándolo de conductas inapropiadas: “Anda con menores de 14 años, es un pervertido”, expresó con firmeza.

La madre también acusó a los jueces de ignorar elementos relevantes del caso: “Hicieron vista ciega”, dijo, y aseguró que la Fiscalía incurrió en falsedades durante el juicio. “Fui yo la que avisé dónde estaba Lautaro”, explicó, en referencia al momento en que decidió llevar a su hija ante la policía. “Dijeron que mi hija se presentó sola, pero eso es mentira. Yo la llevé a declarar para decirle a la policía dónde estaba ese chico, porque capaz que estaba vivo. Eso nunca lo dijeron”, denunció.

Criticó además las condiciones en las que Mía fue retenida por la policía: “La tuvieron más de ocho horas en la cocina de la comisaría, no en una oficina como declaró el policía. Están mintiendo también en eso”.

Una de sus principales quejas estuvo relacionada con el uso del historial personal de los imputados como parte del juicio: “¿Qué carajo importa la vida pasada? Todos tuvimos una vida triste. Se está juzgando un hecho puntual, no el pasado de cada uno”, reclamó.

También mencionó la existencia de denuncias previas contra Ortigoza que, según afirmó, fueron ignoradas por las autoridades. “Ayer también se dijo que hubo una denuncia de abuso y que no la tomaron. Entonces, ¿de qué estamos hablando? También hay cosas que no se quieren decir”, sostuvo.

Finalmente, aunque reconoció la gravedad del ataque, volvió a insistir en que la sentencia fue excesiva: “Yo sé que a nadie se le puede sacar la vida, porque no tenemos ese derecho. Pero doce años es mucho. Y el fiscal tampoco defendió todo lo que debía”, concluyó.