El Gobierno ofrece una recompensa de $2 millones para encontrar a Guadalupe Lucero

Ya van cuatro días de búsqueda y no hay una pista sobre el paradero de Guadalupe Belén Lucero. El Gobierno ofreció una recompensa de 2 millones de pesos para quien aporte datos que permitan encontrar a la nena de cinco años, que desapareció el lunes pasado en la provincia San Luis, mientras jugaba con sus primos en la calle.

A través de la resolución 289/2021, el Ministerio de Seguridad de la Nación, a cargo de Sabina Frederic, informó que la suma “será destinada para aquellas personas que brinden datos útiles que permitan dar con el paradero” de la niña.
 

Quien quiera dar detalles sobre su posible ubicación puede “comunicarse telefónicamente con el Programa Nacional de Coordinación para la Búsqueda de Personas Ordenada por la Justicia”, al número telefónico de acceso rápido 134.

Según se precisó, el pago de la recompensa será realizado en el Ministerio de Seguridad “o en el lugar que designe la representante” de esta cartera, una vez que se analice “el mérito de la información brindada preservando la identidad del aportante”.

En tanto, a las fuerzas federales se les ordenó encargarse de "la difusión y publicación en todas sus formas" del afiche con la mencionada recompensa ofrecida.

Ayer, más de 300 policías de la provincia junto a fuerzas federales realizaron diferentes rastrillajes y allanamientos en el barrio 1 de Mayo en la zona oeste de la ciudad capital, en el Cerro el Lince y buzos tácticos de la buscaron por el río San Luis y dique chico sin resultados positivos.

Los investigadores están convencidos de que la chica no está perdida sino que fue secuestrada. Por eso, apuestan a que la persona que la tiene retenida se vea acorralada y decida liberarla.

En ese contexto, el juez Ariel Parrillis pidió a los vecinos que alerten en el caso de ver alguna menor sola en una espacio público.

Guadalupe tiene 5 años, es de tez trigueña, tiene cabello lacio, por debajo de los hombros, un lunar en la mejilla izquierda y al momento de su desaparición vestía una campera parca negra con capucha, calza rosa y llevaba botas negras.