Canal Beagle: “Podemos empezar a hablar de una temporada de ballenas”

Así lo señaló la bióloga Natalia Dellabianca, quien analizó el crecimiento de avistajes de ballenas en el Canal Beagle y explicó por qué puede pensarse en una temporada estable de estos cetáceos en Tierra del Fuego.

USHUAIA19/07/202519640 Noticias19640 Noticias
Ballenas en el Beagle

En diálogo con Radio Provincia, la bióloga e investigadora del Centro Austral de Investigaciones Científicas (CADIC), Natalia Dellabianca, abordó las causas del incremento en los avistajes de ballenas en el Canal Beagle. Detalló el trabajo de monitoreo que realizan desde el laboratorio de mamíferos marinos, los aportes del proyecto de ciencia ciudadana y las diferencias entre áreas de alimentación y reproducción. También resaltó la importancia de pensar en regulaciones si se proyecta una temporada turística de avistaje.

En primer lugar, Dellabianca explicó "el aumento de ballenas en el Canal Beagle está relacionado con la recuperación de las poblaciones tras el cese de la caza comercial, que ocurrió en la década del ochenta. Como son especies longevas y de reproducción lenta, los cambios se ven décadas después. Algunas están volviendo a antiguas zonas de alimentación, y creemos que el canal es una de ellas”.

En esa línea, la bióloga remarcó "este año registramos al menos 18 ballenas jorobadas que ya habían sido identificadas en temporadas anteriores, y otras 20 nuevas. El número total ronda los 40 ejemplares, y si bien varía año a año, es relativamente constante desde 2018. Algunas se quedan por meses, probablemente porque encuentran alimento suficiente en la zona”, detalló.

Además, sostuvo "lo que nos permite pensar en una ‘temporada de ballenas’ es ver que muchos animales regresan año tras año. Entre marzo y junio, en promedio, el 30% de la población identificada vuelve al canal. Hay ejemplares que desde que fueron registrados por primera vez no faltaron ninguna temporada. Esa fidelidad al sitio indica una regularidad biológica importante”.

Y agregó "desde el laboratorio de mamíferos marinos trabajamos con un proyecto de ciencia ciudadana basado en fotoidentificación. Recibimos imágenes de guías, capitanes, pescadores, turistas y residentes, que nos permiten analizar patrones únicos en las colas o aletas. Así determinamos si un animal es nuevo o ya fue visto. Sin ese aporte, no tendríamos la cantidad de información que hoy manejamos”.

Por último, Natalia Dellabianca advirtió sobre la importancia de una regulación adecuada para el turismo de fauna "si los avistajes se hacen de forma controlada, respetando distancias y tiempos, las ballenas seguirán viniendo. Pero si hay demasiada presión humana o perturbación, pueden migrar a otras zonas con alimento. En muchos países se compatibiliza conservación y turismo, pero requiere normas claras y cumplimiento”, concluyó.

Te puede interesar

Martínez Sosa Banner

Lo más visto

flor Vargas

Vonder

Suscríbete al newsletter para recibir periódicamente las novedades en tu email

Banner Cooperativa Electrica