Balearon un banco de Rosario y amenazaron al gobernador Maximiliano Pullaro y su familia

Un nuevo caso de violencia envolvió este martes a Rosario. El epicentro del hecho fue un banco de esa ciudad, que recibió una balacera por parte de dos delincuentes que se trasladaban en una moto, y el destinatario, nada menos que el flamante gobernador de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, quien asumió hace apenas dos días y a quien le dejaron un mensaje con una amenaza hacia él y su familia.

El mensaje intimidatorio, según confirmó más tarde la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, estaba escrito en un cartón con manchas de suciedad y en imprenta mayúscula, quizás como para darle más relevancia al amedrentamiento.

Los agresores, que dejaron el recado subrayado con al menos cuatro disparos sobre el frente de la entidad bancaria, apuntaron al operativo iniciado esta madrugada en la UP N°11 de Piñero para llevar a cabo la “restitución de los pabellones de alto perfil para jefes narcos y sicarios en las unidades penitenciarias provinciales”, según precisa la información oficial del gobierno de Santa Fe.

De acuerdo al relato de testigos recogidos por medios locales, dentro del banco había tres personas en la zona de los cajeros. Fuera, en la vereda, había otras cuatro. Milagrosamente el hecho no dejó heridos.

Los atacantes se aproximaron este martes por la tarde a la sucursal del Banco Macro ubicada en Ovidio Lagos y Saavedra. Lo hicieron a contramano, por esa última arteria. Cuentan que uno de ellos, en un claro síntoma de impunidad, habría actuado a cara descubierta, a plena luz del día. Después de ejecutar los disparos, huyeron rápidamente.

La advertencia para el gobernador fue que “no se meta con el Pabellón 9 de Piñeiro”. Según dijo antes Pullaro, el movimiento de reclusos en esa institución penitenciaria “va a permitir tener un mayor control” sobre ellos.

“El objetivo es que desde los penales no se cometan delitos; esto significa que si ese preso cometió un delito grave desde la cárcel, van a hablar con sus familiares y abogados a través de un blindex y van a estar monitoreados las 24 horas”, explicó el exsecretario de Seguridad provincial que asumió como mandatario el último domingo.

Pullaro, además, aseguró que en las cárceles se iban a "volver a instalar los inhibidores" y que no los iban "a bajar más". Otra de las medidas apuntadas a la seguridad en las cárceles fue "suspender el ingreso de alimentos porque no se puede requisar la entrada" de esos productos "de todos los presos”.