Trabajadoras de Blanco Nieve impulsan ahora una venta solidaria para poder “parar la olla”

La delegada gremial del SOIVA, Marcela Cárdenas, volvió a manifestar la preocupación de las trabajadoras y trabajadores de la fábrica Blanco Nieve tras los despidos recientes. Según explicó, el conflicto continúa sin avances concretos pese a las audiencias convocadas por el Ministerio de Trabajo.

Cárdenas relató que “tuvimos una audiencia en el Ministerio del Trabajo, y en las dos audiencias anteriores la empresa no se había presentado. En esta última audiencia se presentó el abogado de la empresa, pero con ninguna directiva respecto de nuestro reclamo por el pago de la indemnización que queremos cobrar al cien por cien, ya que nos despidió y es lo legal, lo que corresponde”, remarcó.

La representante sindical indicó que, ante la falta de respuestas, las familias afectadas deberán continuar la vía judicial. En ese sentido sostuvo: “no nos va a pagar, pero la seguiremos a través del camino de la justicia, nos va a tener que pagar nuestra indemnización como corresponde a las treinta y dos familias de los treinta y dos trabajadores, que de hecho estamos, literalmente, con una mano atrás y otra adelante”.

Frente a la delicada situación económica de las personas despedidas —muchas de las cuales permanecen en la planta cuidando las maquinarias— resolvieron impulsar una acción solidaria para poder sostener sus gastos básicos. " Estamos acá desde las 14:30 horas, empezamos una venta, porque obviamente necesitamos subsistir, necesitamos parar la olla literalmente”, explicó.

La actividad consiste en la venta de productos elaborados por las propias trabajadoras. Según detalló Cárdenas: “para tener para comer, porque se imaginarán que con las cuentas estamos abrumados. Ya no damos más, entonces necesitamos subsistir, así que vamos a poner a la venta alimentos elaborados por nuestras propias manos. Entonces, se van a vender porciones de torta, se va a vender pastafrola, se van a vender tortas fritas, hoy a partir de las catorce y treinta. Le pedimos el acompañamiento a toda la comunidad, una vez más, porque necesitamos llevar unos pesos a nuestras casas, a nuestras familias”.

La venta se está realizando  en la planta ubicada en Combate de Montevideo 1441, donde las y los trabajadores mantienen su presencia mientras continúan exigiendo el cumplimiento de sus derechos laborales.