Hoy se cumplen 140 años de la inauguración del Faro San Juan de Salvamento

Basta con pensar en la ciudad de Ushuaia para que nuestra cabeza se llene de imágenes alucinantes. El Canal Beagle con las imponentes montañas fueguinas, la ciudad de Ushuaia, el puerto y el Faro…. ¿del Fin del Mundo?

Si visitaste Ushuaia o estuviste buscando información, incluso si navegaste nuestro blog, habrás notado que Ushuaia cuenta con un pintoresco faro cuyo nombre es Faro Les Eclaireurs y suele nombrarse también como el Faro del Fin del Mundo. Sin embargo, al verdadero Faro del Fin del Mundo lo encontramos mucho más al sur de la isla. ¿Dónde está el verdadero Faro del Fin del Mundo? que podés visitar para ampliar la información.

El caso es que el Faro del Fin del Mundo tiene su propia historia y como somos apasionados de Ushuaia queremos que la conozcas. A continuación te compartimos todos los detalles sobre este mítico Faro.

El Faro que inspiró a Julio Verne

Hablar del Faro del Fin del Mundo es algo que le debemos a Julio Verne. Fue a través de su novela que comenzó a hacerse cada vez más popular entre viajeros y turistas que visitan año a año la ciudad de Ushuaia. Lo cierto es que hoy en día el Faro del Fin del Mundo es todo un icono fueguino aunque, en realidad, no existe ningún faro con ese nombre.

Pero bien… ¿A qué faro refiere la novela Julio Verne? “El Faro del Fin del Mundo” fue publicado en 1905 y se trata de una historia de ficción más que interesante. A modo de resumen, la novela narra la historia de tres marinos que son asignados para cuidar de un faro confinado en el Fin del Mundo. El faro, aislado y desolador, ubicado en la Isla de los Estados y debido a su carácter de inaccesible en la novela lo llaman “El Faro del Fin del mundo”.

Lo lógico sería decir que Julio Verne, en realidad, se inspiró en el Faro Les Eclaireurs para escribir su novela pero lo cierto es que esto no fue así. Como dijimos, la novela de Verne fue publicada en 1905 y el Faro Les Eclaireurs fue puesto en servicio recién en 1920. Además, se trata de un faro muy próximo a la ciudad de Ushuaia, por lo cual de inaccesible y de desolador no tiene nada. Además, tampoco se encuentra en la Isla de los Estados ni tan al sur como narra Julio Verne en su obra.

¿Entonces? Aquí se devela el misterio

El faro que inspiró a Julio Verne no es más ni menos que el Faro San Juan de Salvamento. Este faro fue puesto en servicio en 1884 y funcionó hasta comienzos del Siglo XX. Además, su ubicación es en la Isla de los Estados y es, realmente, bastante inaccesible. De hecho, a diferencia del Faro Les Eclaireurs este faro no recibe ninguna excursión ni puede ser visto a simple vista.

Sin lugar a dudas, la novela de Julio Verne tiene su cuota de realidad y la historia transcurre en el Faro San Juan de Salvamento.

Curiosidades del Faro San Juan del Salvamento

Es el faro más antiguo de la República Argentina, se construyó en 1884 a unos 60 metros sobre el nivel del mar con madera de lenga y con una altura máxima de seis metros. Sin dudas, no es un faro tradicional por su estructura es octogonal. Antiguamente, tenía dos de sus lados cubiertos de gruesos cristales, tras los cuales se colocaban siete lámparas de petróleo que lo iluminaban de noche.

El Faro de San Juan de Salvamento tiene gran importancia para la historia fuegina, ya que durante los años de actividad su luz se convirtió en guía para numerosos barcos que surcaban las aguas en dirección hacia el Océano Pacífico.

Una historia ligada a navegaciones, aventuras y naufragios

Para las embarcaciones, navegar por el océano era toda una aventura que muchas veces podía estar plagada de riesgos. Y en más de una ocasión corrían peligro de zozobrar como consecuencia de las amenazantes olas y las rocas contra las que chocaban. Aunque justamente por esta razón era que el Faro representaba la salvación de cientos de naves que necesitaban ser guiados en medio de las tormentas, o requerían una referencia de cuán cercanos se encontraban de las costas en los momentos donde la bruma marina impedía la visibilidad.

Sin embargo, dada su ubicación, el Faro no lograba proporcionar una buena visibilidad a las embarcaciones. Por este motivo, hacia el año 1902 dejó de prestar servicios y reemplazado por el Faro Año Nuevo en la Isla Observatorio, testigo también de múltiples anécdotas de la historia de las embarcaciones que surcaban las aguas de las costas de Ushuaia.

Sus restos sufrieron el deterioro del tiempo y la hostilidad del clima que caracteriza el extremo sur del mundo. En 1994, se comenzó a desarrollar el proyecto para rescatar el Faro y elaborar una réplica de esta estructura frente a la Costa de La Rochelle en Francia. En el proyecto intervinieron el Museo Marítimo de Ushuaia y los directivos del Museo del Fin del Mundo, con la finalidad de levantar también en Ushuaia una réplica que todos pudieran contemplar.

De acuerdo a este plan, en 1995 se firmó un convenio entre la Armada Argentina, el Museo del Fin del Mundo y el Museo Marítimo de Ushuaia para el relevamiento de San Juan de Salvamento, debido al valor histórico de la estructura. En febrero de 1997, el rompehielos ARA Almirante Irizar, que regresaba de una expedición a la Antártida, trajo consigo los restos del Faro hasta Ushuaia.

Construcción de una réplica del Faro del Fin del Mundo

Los planos creados a partir del relevamiento arqueológico de los restos originales del Faro, ayudaron a la construcción de una maqueta en escala 1/1. Esta pieza la crearon con la finalidad de ser exhibida en el Museo Marítimo de Ushuaia y se mostró de forma oficial al público en octubre de 1997.

La creación de esta réplica sirvió como una oportunidad ideal para conocer más de la historia de este Faro del que no se tenía mucha información. Fotografías y relatos de Roberto Payró contribuyeron a obtener parte de la información que se necesitaba para llevar a cabo este proyecto.

En el interior de la réplica, que se encuentra expuesta en el Museo Marítimo de Ushuaia, hay un espacio para conocer los trabajos arqueológicos de la Isla de los Estados y en San Juan de Salvamento. También se puede descubrir cómo era la vida de los antiguos guardafaros o “torreros”, quienes eran los hombres que se encargaban del funcionamiento del Faro y que debían pasar solitarios meses en la isla, alejados del mundo y en compañía de la bruma marítima.

Conocer el Faro San Juan de Salvamento es posible

Desde los uniformes que usaban hasta las bebidas que tomaban los torreros forman parte de las anécdotas históricas del Faro San Juan de Salvamento.  Los visitantes del Museo Marítimo de Ushuaia tienen también la oportunidad de adquirir el libro editado por el museo en relación a este interesante tema: “La Isla de los Estados y el Faro del Fin del Mundo”, donde se relata con detalle las vivencias de los hombres que se encargaban del Faro.